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La inflación y la sequía 'marchitan' la cita más importante para las floristerías – RTVE

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Junto a San Valentín y el Día de la Madre, el Día de Todos los Santos es la fecha más importante para el sector florero del año. En pocos días se concentra gran parte de la facturación anual, pero este 2022 ha quedado marchitada por la inflación y el encarecimiento de la energía.
"Nos ha subido todo, pero especialmente la factura de la luz, se me ha triplicado", asegura la presidenta de la Asociación de Floristas de Toledo y gerente de la floristería El Paraíso de Sonseca, Irene Martín.
Con un negocio que necesita vitalmente el uso de cámaras frigoríficas para mantener sana la flor en épocas de calor, la no llegada del frío y la falta de lluvias ha provocado que tengan que hacer un mayor uso de este recurso de refrigeración provocando un gasto mayor del esperado. "Estimo que los costes globales han subido un 15% respecto a otros años", añade Martín.
Un contratiempo para un sector que espera recuperar este 1 de noviembre las cifras de facturación de ventas prepandemia. "Esperemos que sea un año de recuperación y de volver a niveles de 2019, como se está viendo a lo largo de esta campaña", cuenta la directora de la Asociación Española de Floristas de Madrid, Olga Zarzuela.
Sin embargo, el alcanzar cifras de facturación prepandemia no se va a traducir en el mismo beneficio que hace tres años. El motivo es "fácil" de comprender, aseguran las floristerías. Aunque sus costes hayan subido un 15%, no pueden trasmitir ese aumento directamente al precio que pagan los consumidores porque sería "inasumible".
Como consecuencia, las floristerías han optado por reducir parte del beneficio y asumir ellos mismos el impacto de la inflación, reduciendo margen de beneficio.
"El vendedor está subiendo la flor por los costes de transporte y energía, pero no se repercute en el consumidor directamente porque se juega gran parte del año, hay que ser muy prudentes", opina Zarzuela.
Una prudencia que se extiende por todos los eslabones de la cadena de producción. Desde los productores a los vendedores, pasando por los importadores. "Los costes no los podemos trasladar en su totalidad a la cadena comercial porque estaríamos fuera de mercado. El cliente no acepta una subida de precios tan elevada", explica en la misma sintonía que Zarzuela, el presidente de productores del Comité de Flor y Planta Viva de FEPEX, Juan Daniel Marichal.
Y es que esa subida de precios se ha traducido de un incremento de "unos tres o cuatro euros" para el bolsillo del consumidor, por ramo medio.
Para hacer frente a esta problemática, muchas floristerías han optado por traer productos de "proximidad", ya que la calidad sigue siendo "excelente" y se ahorran más gastos, aseguran.
A la hora de realizar las composiciones, los profesionales han encontrado alternativas de mercados, variedades y flores para la realización del mismo. El sector ha experimentado "un cambio de tendencia apostando por variedades producidas en fincas locales y de proximidad", afirma el director general de Interflora en el sur de Europa, Luca Gerini. "Así conseguimos minimizar el impacto del encarecimiento de la energía, entre otros”, añade Gerini. 
Y es que no todas las flores han subido por igual. "Los productos nacionales que no llevan gastos de transporte apenas, como puede ser la margarita o alguna flor de relleno, casi no han tenido incremento y lo podemos asumir nosotros mismos", explica Mariola Rodríguez, responsable de Floristería Mariola.
Pero con las flores españolas no es suficiente para abastecer a todo el mercado. Es por eso que sea irremediable el importar productos del extranjero. Sobre todo, los importadores echan mano de mucha flor de Colombia, Ecuador, Kenya y Holanda, lo que hace que se encarezca más el precio final.
"Es verdad que la que viene del exterior, como puede ser la rosa o las orquídeas, que normalmente vienen de Latinoamérica, sí que repercuten más en el precio", añade Mariola sobre unos ramos y coronas que, aunque sean algo más caros que otros años, vuelven a dar colorido a los cementerios de toda España este 1 de noviembre. 
Crisantemo, clavel y rosa son las flores naturales más demandadas por los clientes. Y también el gladiolo, lilium o anthurium que se combinan con verdes como la paniculata, la esparraguera, el helecho de cuero o el eucalipto, en unos ramos que este año se han realizado con más antelación que en campañas anteriores. 
El temor de problemas de aprovisionamiento por los costes del transporte ha llevado a muchos clientes a comprar sus coronas y flores días antes. Uno de esos compradores previsores ha sido David Rodríguez, que con casi una semana de antelación encargó y recogió su pedido.
"Como este año ha habido problemas en los suministros en alguna ocasión y en algún producto, he intentado anticiparme porque me preocupaba que llegase el día de Todos los Santos y no tuviese exactamente lo que estaba buscando", explica sobre una cita marcada en el calendario de todos los españoles.   

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