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Inflación: ¿Hasta cuándo habrá aumento de precios y qué hacer para evitarla? – El Heraldo de México

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ECONOMÍA
La inflación en México es un tema que quita el sueño y preocupa a muchas personas, hace un par de semanas, el Banco de México (Banxico) informó que esta se mantuvo en el 8.7 % anual en septiembre, su nivel más alto para un periodo igual de los últimos 22 años en el país. Sin embargo, a muchos no les queda claro ¿qué es la inflación? Y hoy te lo explicaremos. 
La Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) señaló la semana pasada que la inflación tendrá mayor magnitud y duración a lo previsto con un entorno “más complejo” que no permitirá recuperar la meta de una tasa general de 3% anual hasta el tercer trimestre de 2024., debido a las presiones inflacionarias externas derivadas de la pandemia de covid-19 y del conflicto geopolítico, en referencia a la guerra en Ucrania. Banxico prevé ahora que la inflación general promedie un 8.6 % anual en el último trimestre de 2022 tras la expectativa anterior de 8.1 %. 
De acuerdo con el mismo Banxico, la inflación es el aumento sostenido y generalizado de los precios de los bienes y servicios de una economía a lo largo del tiempo. Para medirla, cada gobierno tiene métricas específicas, en México se le da seguimiento con el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), el cual es considerado muy sólido. El banco Santander explica que podrían existir tres tipo: 
“La inflación afecta negativamente el desarrollo económico, ya que altera el adecuado funcionamiento de los mercados, lo que a su vez interfiere en la asignación eficiente de los recursos. Por lo tanto es oportuno conocer sus determinantes de largo y corto plazo”, asegura Banxico. 
Existen varias razones, como son “los determinantes de corto plazo, que tienen un impacto sobre la inflación en periodos menores a un año, en tanto que los de largo plazo demoran más tiempo”, explica Banxico. Algunos de los factores son los siguientes: 
La incertidumbre en los mercados alimentarios está golpeando a los agricultores de todo el mundo, tanto de países ricos como de pobres, lo que se traduce en más dificultades para producir alimentos debido a los altos costes de producción y un mayor impacto del hambre. 
Por su parte, el Banco Mundial estima que los precios seguirán altos hasta finales de 2024, mientras que los mercados de fertilizantes continúan volátiles, especialmente en Europa, donde la falta de gas natural y su encarecimiento han llevado al parón de fábricas productoras de estos insumos. 
En México, un ejemplo de lo que sucede es que el precio de la tortilla de maíz, un insumo esencial en la dieta de los mexicanos y que ya supera los 22 pesos, no bajará su costo en los siguientes meses y podría alcanzar los 24 pesos, según los pronósticos de la Red de Maíz, organización de industriales de la masa y tortilla en la Ciudad de México.
La semana pasada, el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, en la 56ª Reunión de la Red de Ministros de Finanzas y Banqueros Centrales organizada por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), en Washington, aseguró que el problema se tratará desde la oferta y se incentivará la la producción de maíz, frijol, soya, verduras. También habrá la eliminación temporal de requisitos burocráticos y medidas no arancelarias para agilizar la importación. 
Por otra parte, entre los factores positivos para la economía mexicana, el banco central resaltó “el buen desempeño de las exportaciones”, una recuperación en la inversión y una mejora en los indicadores del mercado laboral, que está en una situación similar a la de antes de la pandemia. 
También las condiciones mundiales podrían llevar a una deflación, cuyas causas son muy variadas, pero generalmente se asocian con reducciones en la oferta de dinero y en la demanda de bienes. 
“Si los precios bajan, el valor real del dinero aumenta, lo cual es bueno para los consumidores. Sin embargo, si esta dinámica se prolonga, puede desembocar en una recesión económica, es decir, un escenario caracterizado por la disminución generalizada de la actividad económica durante un periodo prolongado, en combinación con bajos niveles de consumo, inversión y empleo”, dijo Banxico.
En la parte ciudadana hay poco que se pueda hacer, debido a que no depende de la gente, sino de los mercados. Aun así, hay acciones en concreto que se pueden llevar a cabo para evitar que el dinero rinda menos, de acuerdo a una entrada en linea de BBVA, tales como: 
 
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Con información de EFE 

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